Ayer por la tarde llegaba la noticia, desde Salta (vía Twitter), de que el plantel de San Lorenzo esperaba por la llegada de algún dirigente para normalizar la situación económica de los jugadores mas jóvenes del plantel. Esta delicada situación, mas la dilatada renovación del vínculo de Juan Carlos Menseguez y la ausencia de refuerzos (sólo llegó el colombiano Leonardo López), rápidamente hace suponer que el ánino de Ramón Díaz no es el mejor. Para colmo trascendió que el técnico sigue hablando con jugadores (habría convencido a Diego Placente para que vuelva) pero, por el presente económico del club, la negociaciones se estancan cuando se empieza a hablar de plata.
Para depejar cualquier sospecha, el tesorero Claudio Di Meglio comentó que, cuando se acordó la contratación del riojano, se dejó en claro cual era la situación del club: Después de equilibrar el presupuesto dando de baja varios de los altos contratos que se firmaron los últimos tres años, sería muy difícil volver a contratar jugadores de elite. Por lo tanto, mas allá de que sigan acercando jugadores, será muy complicado llegar a un acuerdo por la crisis económica por la que está atravesando San Lorenzo.
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